Por ser la Educación un proceso permanente personal, cultural y social que se fundamenta en una concepción de la persona humana, de su dignidad de sus derechos y deberes, es imprescindible que dichos conceptos sean el que hacer pedagógico en la vida cotidiana del estudiante. Con lo anterior se contempla en el ser humano las dimensiones: física, Psicológica, intelectual, moral, espiritual, social, afectiva, ética, cívica y demás aspectos que hacen parte de su personalidad.
La Educación que imparte la Institución, propende para que los estudiantes adquieran una capacidad crítica, reflexiva y analítica que fortalezca el avance científico y tecnológico orientado al mejoramiento de la calidad de vida y la vinculación en el mercado laboral mediante estrategias de emprendimiento en la especialidad agroindustrial. Se fomentará una Educación objetiva de acuerdo con nuestra realidad y el contexto socioeconómico en el que se encuentra inmersa la Institución Educativa Técnica Agroindustrial San Gerardo, pensando en el sector rural, interesándonos por el espíritu emprendedor de generar microempresas y la formación por la participación en la vida social del país; recobrando la importancia de los valores humanitarios, siendo justos consigo mismos e inculcando la honradez, sinceridad, justicia, fraternidad, responsabilidad, y en fin todo en cuanto a la educación sea pertinente para que los estudiantes adquieran una formación integral.
En consecuencia se busca que los estudiantes se vinculen productivamente al medio rural, en una forma racional, óptima y segura, con un negocio agroindustrial lucrativo, de manera autónoma o independiente, como propietario o copropietario, de tal manera que le permita progresar en los procesos de su educación permanente y del mejoramiento de toda su vida humana, socio-cultural y económica para lo cual se busca que en el aspecto de formación profesional, al terminar su educación básica y media vocacional, logre los objetivos de nuestra institución.
Lo anterior permitirá el respeto a las autoridades legítimamente constituidas, desarrollando hábitos y actitudes de buenos vecinos y ciudadanos, puesto que la comunidad es un conglomerado que se destaca por sus costumbres, ideas y buenos sentimientos.